martes, 12 de junio de 2018


El siguiente post habla de espiritualidad no de religión, por favor no confundir

El animal humano siempre supo que había algo a un nivel superior, al que le rindió respeto y consideración. "Eso" superior fue llamado de muchas maneras, algunos lo nombraron Dios.
Dios no es un Ser de carne y hueso, Dios es sutil, porque Dios es una energía, la primera, la inicial, la original, la que crea todas las cosas a partir de partes de ella misma. Dios es una energía de altísima vibración, es la energía a la que conocemos con el nombre de Amor.
Si Dios es Amor, y el Amor es una energía neutra, cómo podemos llegar a considerar que nosotros, hijos de Dios hechos a su imagen y semejanza, podemos ser castigados por nuestro creador que es puro Amor. El Amor no castiga, no deja de querernos, ni manda cosas desagradables para ajusticiarnos o para que sus hijos sufran.
Yo les quiero proponer, aunque sea por el día de hoy, que dejemos de lado esa idea de que si nos pasa algo negativo es porque nos hemos portado mal y Dios nos está castigando....O porque se debe al Karma que ha vuelto para ajusticiarnos....Y empezamos a evaluar qué me ha llevado a estar en esa situación, qué tengo que aprender de los patrones que repito, haciéndome responsable de lo que me pasa en vez de adjudicarlo a castigos divinos o a la rueda del destino.
Cuando adjudicamos hechos de nuestra vida a Dios o al Karma, desplazamos el poder y control de nuestra vida a "cosas" que están fuera de nuestra mano, e incorporamos la idea y sensación de estar a merced del destino o de una voluntad ajena.
Si en cambio consideramos que nosotros hemos atraído esa situación o la hemos generado inconscientemente, entonces podemos hacer algo para comenzar a realizar cambios que ayuden a lograr los objetivos y vida que deseo.

Les propongo, aunque sea que por el día de hoy, que realicen este ejercicio de consciencia, una mirada a la profundidad de nuestro propio Ser.

Feliz martes corazones 
Acompañante en Bioneuroemoción®
Registros Akáshicos



No hay comentarios:

Publicar un comentario